La cocina, a lo largo de la historia humana, ha experimentado una evolución constante. No solo ha sido testigo de avances tecnológicos significativos, sino que también se ha transformado en un espacio tanto funcional como estético en nuestros hogares.
Uno de los electrodomésticos que ha revolucionado la cocina moderna es la campana extractora. Esencial para mantener un ambiente limpio y saludable, se encarga de eliminar humos, olores y grasas durante la cocción. Sin embargo, con el tiempo, la grasa se acumula en el filtro y en otras partes de la campana, lo que puede afectar a su funcionamiento y a la estética de la cocina.
Con estos simples pasos, se puede mantener la campana extractora en óptimas condiciones, asegurando un ambiente limpio y saludable en la cocina.
El vinagre blanco de limpieza es un excelente agente de limpieza natural. Para utilizarlo, mezcla vinagre blanco con agua caliente en una proporción de 1:1. Aplica la mezcla sobre la grasa acumulada utilizando un paño o una esponja y deja actuar durante 15 minutos. Luego, retira la mezcla con un paño húmedo para revelar una superficie limpia y reluciente.
Por otro lado, el bicarbonato de sodio es conocido por sus propiedades desengrasantes. Para aprovechar sus beneficios, espolvorea bicarbonato de sodio sobre la grasa acumulada y añade un poco de agua caliente para crear una pasta. Frota la pasta sobre la grasa utilizando un paño o una esponja y luego retira la pasta con un paño húmedo.
Es importante cambiar el filtro de carbón activado de la campana extractora cada 3 o 4 meses para garantizar un rendimiento óptimo. Este filtro ayuda a eliminar los olores y las partículas de grasa del aire, por lo que su mantenimiento regular es fundamental para asegurar un ambiente limpio en la cocina.
Además, en caso de cocinar con frecuencia o con platos que generen mucha grasa, se recomienda considerar la limpieza más frecuente de la campana extractora. Esto puede implicar limpiarla semanalmente o incluso varias veces por semana, según sea necesario, para evitar que la grasa se acumule y afecte su funcionamiento.
Por último, es importante tener en cuenta la ventilación adecuada de la cocina durante la cocción. Abrir ventanas o utilizar un extractor de aire puede ayudar a eliminar el vapor y los olores, reduciendo así la cantidad de grasa que se deposita en la campana extractora y prolongando su vida útil.
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